INAH… pilar del turismo.
Las afectaciones de partidas presupuestales de la Federación iniciaron hace dos años, sí desde que entró el actual Gobierno y han sido impactantes en muchos sectores clave como salud, educación, ciencia, tecnología y desarrollo económico, por mencionar los más relevantes.
El desarrollo económico va ligado al comercio a la industria. Sin embargo, no toda la industria es de transformación, y afortunadamente para nuestro País, tenemos la llamada “industria sin chimeneas” que la constituye el turismo. La gama de atractivos es enorme y uno de tantos es nuestro pasado próximo y remoto. La época virreinal se distingue por su arquitectura y urbanismo en tanto la prehispánica por sus edificaciones, esculturas, usos y costumbres, ciencia, y también su cultura culinaria.
La Organización Mundial del Turismo, OMT, organismo especializado de la ONU, señala en su página1 que el turismo debe ser puntal para superar la pandemia que aqueja a todo el orbe y es urgente que los países lo atiendan para recuperar el desplome de los últimos meses. Próximamente, en el mes de octubre, se celebrará una reunión cumbre en donde los países miembros de la ONU expondrán sus agendas para remontar la adversidad actual y esperemos que nuestro País lleve su estrategia.
Cada país presentará iniciativas a partir de su base turística la cual puede incluir destinos de cuidad y otros de playa, o ambos, como lo es el nuestro. Lo que es un hecho es que el turismo debe servir para la reactivación económica pues para muchos su participación en el Producto Interno Bruto es de consideración. De acuerdo a la referencia aludida, para nuestro País, el turismo representa el 8.7%, con la captación de aproximadamente 40 millones de turistas y genera el 6% del empleo nacional; es el segundo más importante después del sector automotriz.
México ocupa el sexto lugar en la captación de turistas, atrás de Francia con 87 millones, España con 82, EEUU con 76, China con 61, e Italia con 58. Llama la atención que para los españoles su turismo aporta el 14.6% y es el sector más importante. Nuestro País podría mejorar su participación en el PIB y con ello beneficiar a miles de personas que trabajan en el sector, máxime que tenemos una oferta variada y de consideración.
Párrafos atrás se mencionaba que se tienen destinos de playa, ciudad y ambos. Sobresale la oferta con base en nuestro pasado prehispánico cuyas manifestaciones se dan en todo el territorio nacional. Es de señalar que su conservación y desarrollo ha estado bajo la custodia estatal y en la actualidad del Instituto Nacional de antropología e Historia, INAH; pero he aquí donde empiezan a surgir problemas pues el Gobierno actual pretende reducir su presupuesto.
En efecto, todo ese patrimonio de los mexicanos se ve amenazado por el recorte presupuestal del 75%, sí, leíste bien amigo lector, y trabajarán con un mísero 25% de recursos para seguir operando. Hace unos días apareció un interesante artículo2 en el que el autor revela lo anterior y además hace diversas consideraciones que ponen en relieve lo perjudicial de la absurda medida.
Días después de la aparición de la nota, la reacción de la comunidad arqueológica internacional manifestó3 abiertamente su rechazo absoluto dando razones de peso que ponen en entredicho la decisión gubernamental. Es muy preocupante que el propio Director del INAH ha dado su anuencia siguiendo las instrucciones del Presidente de la República, quien no aprecia lo que la institución representa para el País, y que el turismo puede y debe ser un motor clave en el desarrollo socioeconómico de México.
El INAH es un pilar del turismo y tenemos que apuntalarlo.
1 Organización Mundial del Turismo, ONU, Julio 2020
2 “El INAH”. C. Lomnitz. Revista Nexos. Julio 2020
3 “Piden revertir el recorte al INAH” Excélsior Julio 2020
16 de julio del 2020