INSTALACIONES OCIOSAS … a darles vida


Hace poco más de seis meses las instalaciones que ocupaba la presidencia municipal, fueron reubicadas en la parte nororiente de la cabecera municipal, en un nuevo conjunto administrativo muy funcional, tanto para los servidores públicos como para los ciudadanos que acudimos allá para hacer algún trámite. Este cambio era por demás necesario, dadas las innumerables molestias que causaba el que casi toda la actividad burocrática, se llevara a cabo concentrada en un solo sitio, en el mismísimo centro de nuestra ciudad.

Una vez hecho el cambio, empezó el jaloneo, válgase la expresión, del futuro uso de las instalaciones, oyéndose propuestas por demás absurdas y sin ningún sentido, una especie de “lluvia de ideas” pero sin orientación alguna. Estimado lector, me parece que el desarrollo de nuestra ciudad a lo largo de cuatrocientos años, no está para ver quien grita más fuerte sino para escuchar, propuestas, pero formalmente sustentadas de la ciudadanía, pero también de las autoridades a quienes elegimos y que son las depositarias de nuestra confianza en diversas actividades, una de ellas es precisamente el uso futuro de dicho inmueble. Me parece que es más que necesario, el abrir los espacios en los que nuestra autoridad se exprese y hable sobre su gobierno, cuya guía se esbozó en las campañas políticas, sin embargo, es prudente dejar oír a los ciudadanos, en particular en este punto, que no había aparecido sino recientemente. Como ciudadano común y corriente, doy mi parecer, incluso sin que se me haya pedido.

Hace unos años, tal vez diez, estaba preparando una conferencia sobre la extracción de agua de pozos en la zona de Laguna Seca, en el municipio vecino de San Luis de la Paz y de San Miguel y era necesario dar algunos antecedentes históricos, por lo que traté de conseguir información y el resultado fue desastroso no habían datos, salvo los urbanos en las cabeceras municipales. Lo mismo ocurrió cuando trataba de conseguir datos históricos para mi libro del agua. Total, no tenemos archivos, como si nos hubiese dado amnesia o en términos actuales, como si nos hubiesen borrado el disco duro. Independientemente que el famoso incendio en las instalaciones de la presidencia en 1916, esfumó nuestra historia escrita, a partir de esa fecha, algo debería quedar, pero ¿dónde?. Querido lector, ¿qué no nos merecemos el tener un Archivo Histórico Municipal en forma?; es una pena que en la actualidad se encuentra ubicado, sin letrero alguno que lo identifique, en la “azotea” de teatro Ángela Peralta, en donde una sola persona, con grandes esfuerzos, carga con la responsabilidad de ordenar cajas y cajas de material. ¿Qué no deberíamos darle al Archivo, un lugar digno a nosotros mismos

y a nuestra Ciudad? ¿Por qué no ubicarlo en las instalaciones ociosas de la antigua presidencia municipal?. Me parece que es un excelente momento para plantear la necesidad de dignificar estos aspectos relacionados con nuestro pasado, con nuestra historia. Tenemos un solo museo, en una ciudad que pretende ser patrimonio de la humanidad, pero ¿qué no tenemos algo más que mostrar en otro museo a ubicarse en esas mismas instalaciones sin uso? Ese museo podría albergar salas relacionadas con la historia de San Miguel, la época prehispánica, la colonial, la independiente, la revolucionaria, la cristera; claro que tenemos cosas que mostrar a nosotros mismos, a nuestros hijos y nietos y también a quienes nos visitan. Por qué no abrir salas relacionadas con sus aspectos económicos, de su agua, su industria, su agricultura; por supuesto que hay aspectos desconocidos y que podrían y deberían ser exhibidos. El cronista de la ciudad existe, pero trabaja fuera de San Miguel, aquí no tiene oficina ni quehacer definido ¿por qué no se le da su lugar y en un sitio en el mismo inmueble? Muchos municipios tienen desde la época colonial un “Boletín Oficial”, a cargo de sus archivos históricos y de su cronista, ¿qué no es tiempo que empecemos con en nuestro y que tenga sede en esas instalaciones en desuso? Reivindiquemos nuestra Historia, ya tenemos el lugar, la antigua presidencia municipal.